Por Alberto Esono Ondo Obono
Las academias de policías, son centros de entrenamiento para los futuros agentes de policías, algunos funcionan también como colegios o Universidades, todas ellas realizan diversas verificaciones a los candidatos, exámenes, pruebas físicas, médicas etc. y ofrecen formación a los futuros agentes para hacer posible una mejor aplicación de la ley.
Los aspirantes mejoran sus habilidades de conducción de vehículos, realizan diversos entrenamientos, aprenden a trabajar en equipo y llevan a cabo prácticas de tiro con armas de fuego. Los colegios o institutos Universitarios son establecimientos de enseñanza de investigación, cuya finalidad es brindar capacitación y perfeccionamiento de nivel superior a los cuadros de la policía.
Los aspirantes a policías, están obligados a adquirir conocimientos profesionales para investigar y desarrollar doctrinas policiales que garanticen, el fiel cumplimiento de la misión encomendada a la policía.
En definitiva, la policía ha de ser parte de los cuerpos de seguridad del Estado, tutelado bajo las ordenes del Ministerio del Interior, puede actuar en todo el territorio nacional, así como, en colaboración con otros países a través de Interpol. Garantizar la seguridad ciudadana es su misión principal, incluido la protección del libre ejercicio de los derechos y libertades.
Como institución no delibera ni participa en acción política partidaria, ejerce la función política de manera integral y bajo mando único Ministerio del Interior.
Academia militar: Para recibir instrucción militar, hay que acudir a las academias militares, el propósito es que los reclutas reciban autorización para que puedan manejar correctamente, el equipo técnico o en el campo de batalla. Antes de comenzar la instrucción militar, se debe pasar unos exámenes médico y físico, si es apto, empieza el entrenamiento básico o primario.
Aquí sólo comentamos los niveles básicos de la policía y del ejército, para ver que cada cuerpo ejerce diferentes funciones, la escala superior y los mandos de ambos cuerpos es otra historia.
El sr. presidente don Teodoro Obiang Nguema, se le nota mucho tal vez demasiado, que nunca leyó a Platón quién dijo, el comienzo es la parte más importante del trabajo. El jefe del fallido Estado de Guinea Ecuatorial, Sr. dictador de normas, gran Maestro, líder de las sabias orientaciones y único hombre; ordenó levantar cuatro paredes cubierto con chapas de zinc y dijo, esto, es una Academia para todos, y, todos dijeron que sí con aplausos. En ese barracón (perdón) Academia instruyen a todos por igual policías y soldados sin pruebas médicas ni físicas, el 98% son analfabetos se pueden imaginar, un caos monumental. La situación se agrava a medida que llega el final del curso porque hay que decidir, quiénes son los policías y quiénes son los soldados, nadie puede decir que es mejor que el otro porque no han aprendido nada; los aspirantes procedentes de Mongomo pueden elegir lo que desean ser policía o soldado el resto, lo decide el General de cinco estrellas tan analfabeto como los policías y soldados es naturalmente de Mongomo y cuñado del sr. dictador de normas; la decisión es ecuánime, tú policía tú soldado el dedo del general, es el que determina de ipso facto los méritos académicos de cada uno; cuando los sueltan a las calles del país, ninguno sabe las funciones que debe ejercer y es por ello que, el pueblo sufre las consecuencias un desbarajuste indescriptible lo vemos a diario.
La dictadura tolera la corrupción abiertamente, porque le resulta muy rentable entre otras sustituye el salario, la administración no puede pagar a los funcionarios.
Los que controlan el mundo, están seguros de que unos países tienen derecho a especializar en ganar siempre y otros en perder siempre (Guinea Ecuatorial), nuestro país fue muy precoz, desde la noche de los tiempos se especializó en perder siempre, a partir de que los Europeos del Renacimiento se abalanzaron y le hundieron los dientes en la garganta, se adueñaron a perpetuidad de las personas materias primas incluido, el saqueo no cesó ni con la independencia, a pesar de que la mayoría de los invasores, regresaron a sus países de origen, antes, aseguraron de que sus puestos, los ocupasen gente de su confianza como (Teodoro Obiang Nguema) la razón, seguir haciendo más de lo mismo.
El Sr. Obiang, no tiene el menor interés en averiguar si el patriotismo podría resultar más rentable que la traición, o si la mendicidad es la única forma posible de llevar a cabo la política internacional.
Después de la independencia en 1.968, Guinea Ecuatorial se convirtió en la finca privada de la familia Teodoro Obiang Nguema, donde la tortura ocupa un lugar central dentro de los procedimientos militares, policiales y carcelarios con evidencias totalitarios muy claros. La corrupción y la tortura llevada a cabo por funcionarios del Estado, es una realidad incontestable sistemática la extensión y tipología ha ido variando a peor a lo largo del tiempo, la práctica de los malos tratos incluidos no es una excepción, sino la norma.
Los autores no actúan a su libre albedrío, sino dentro de un sistema que les da amparo y cobertura, el epítome de la familia Obiang Nguema cuenta con la colaboración de todo tipo de seudo profesionales de muy dudosa preparación, Médicos, secretarios, Jueces, fiscales, Generales, coroneles etc. aunque en 2006 entró en vigor una ley para acabar con la tortura, en la práctica todo aquel que lleve uniforme militar y policía sigue usando la fuerza bruta para la extorsión.
Desde 1.968, la excolonia española está tipificado como uno de los países más represivos del mundo, ya sea por las acusaciones de detenidos, saqueos a comerciantes, torturas de disidentes o las
denuncias de repetidos fraudes electorales hechas por la oposición, La ONU, Amnistía Internacional, algunas comunidades internacionales y organizaciones defensoras de los derechos humanos.
Los guineos ecuatorianos de 50 años, nacieron y crecieron en un país donde los derechos humanos están siendo violados de manera constante y sistemática.